Congreso de la Sociedad de Psiquiatría de la Infancia y Adolescencia


Los Dres. Paz Valenzuela, Susana Cubillos y Sergio Zamora, participaron con éxito de las actividades académicas de actualización del Congreso Científico de la Sociedad de Psiquiatría de la Infancia y Adolescencia, que se realizó en la ciudad de Santa Cruz, en noviembre.

Dentro de las problemáticas abordadas, la necesidad más urgente fue la de garantizar de forma efectiva la protección de niños y niñas en situaciones de riesgo o de vulneración de sus derechos. Con relación a lo anterior se constituyó una mesa de Infancia con el fin de diseñar mejores políticas públicas a implementar, siendo la primera medida la reestructuración de los programas dependientes del SENAME.

Sin embargo, el riesgo de daño emocional temprano no solo ocurre en las familias con condiciones sociales adversas, sino que se extiende a todos los grupos sociales. Aquí lo importante es tener en cuenta que cada vez hay más evidencia científica que demuestra que somos mucho más sensibles ante ciertas situaciones de lo que pensábamos y que las emociones negativas que se experimentan en etapas tempranas de la vida, debido a “eventos tempranos adversos”, generan miedo y angustia en los niños dejando huellas en los circuitos cerebrales de la memoria emocional, que más tarde se activarán. Por ejemplo al observar rostros de personas enojadas, rabiosas o agresivas puede evocar una atmósfera emocional de peligro y miedo, vivida tempranamente podría reforzar sentimientos de inseguridad y desvalimiento. Para solventar esto hay cada vez más talleres de aprendizaje de habilidades para la crianza, y el cuidado del ambiente emocional favorable para el desarrollo, que resultan necesarias en un contexto de vida de alta exigencia y tensión para los adultos. Debido a estas dificultades está comprobado que el juego por sobre todo, favorece la neurogenesis, es decir, el desarrollo de las interconexiones del cerebro en crecimiento, incrementando la capacidad reflexiva y las distintas inteligencias humanas.

En la actualidad resulta también urgente educar para prevenir el daño por inicio de consumo de alcohol y drogas en niños y adolescentes, debido a que la evidencia científica actual demuestra que el desarrollo cerebral se encuentra en un periodo crítico de su progreso. Para entenderlo mejor, alrededor de los 15 años ocurre algo parecido a una poda y reseteo de las estructuras neuronales y los programas que coordinan las funciones cognitivas y de regulación emocional. Es por ello que es un momento de alta susceptibilidad de daño, generando la pérdida del potencial de desarrollo de la persona. Se hace necesario que las madres y padres tengan una postura clara e informada al respecto frente a sus hijos e hijas. Chile es uno de los países con mayor consumo de marihuana en jóvenes, más altas tasas de consumo de alcohol y tabaco en mujeres, y con baja percepción de daño. Esto significa que hemos llegado tarde con la evidencia científica y debemos esforzarnos por revertir la creencia, errada, de que la marihuana es inocua.

Hoy existe consenso en la comunidad científica que en embarazo y en periodo preconcepción la tolerancia al alcohol deber ser “cero”, ya que no hay dosis segura.

Otra problemática emergente sobre la que existe mucha controversia es principalmente por desconocimiento referida al desarrollo de identidad de género que sigue una ruta diferente a la de la mayoría de la población. Al respecto es clave señalar que existe un cuerpo de investigación reciente, que ayuda a los profesionales a acompañar y orientar a las familias para enfrentar cuidadosa y amorosamente una situación tan compleja y sensible como ésta.

Información más detallada sobre estos y otros temas de interés, se incluirán próximamente.

Comité editorial.